miércoles, 6 de abril de 2011

4*

  Frío, hacía mucho frío.Me desperté.Podía escuchar unas voces masculinas hablar sobre como acabar con una mujer, no parecían estar muy lejos, quizá podría levantarme, acabar con ellos y escapar...Intenté abrir los ojos con cuidado para que no notaran que estaba despierta.No veía nada tenia una pared delante estaba llena de manchas de sangre reciente. Me pregunté quién era la persona que derramó tanta sangre y por qué la maltratarían así. Miré mi cuerpo. Yo era esa persona. Intenté moverme,mis músculos no reaccionaban, por mucho que intentaba moverlos era como si una fuerza superior a mi me sujetara y no quisiera soltarme.
  -Eyh! La puta esa ya despertó!
   Mierda! Me cogieron... Y ahora que hago... Tengo que intentar parecer aún medio dormida y recopilar más información de este sitio para salir luego de aquí... No tengo tiempo que perder.
  -Sabes qué zorra? No estás sola. La rubia cachonda te siguió hasta aquí e intento recuperarte... Jajajaja Seréis insensatas... Nadie puede con el Jefe.
  -Mel?! Qué haces aquí?! Estas loca?! Te matarán!!
  -No pasa nada, vine aquí por ti, para decirte algo... Que no te rindas, que luches por lo que quieres y que NUNCA, nunca jamás de los jamases, dejes que algo o alguien te frenen; porque nadie vale lo suficiente como para influenciar en ti lo más mínimo. Recuerda esto, esté donde esté, esté como esté, yo siempre estaré apoyándote.
  -Dejad de hablar ya!!
   -No hables como si fueras a morirte. Yo te salvaré. No permitiré que te pase nada! Me oyes?! No te dejaré caer!!
   -QUE OS CALLÉIS!!
   -Viene el Jefe para aquí, está a punto de llegar. El decidirá como acabaréis. Callaos, no oséis mirarlo a los ojos y por nada del mundo le faltéis al respeto.
   -Que te den por culo gilipollas! Yo hago lo que quiero!
   -Mina, hazle caso. Así saldrás viva de esta.
   (...)
   -NO!!POR FAVOR!!DEJADLA!!ELLA NO HA ECHO NADA!!POR FAVOR!!No le hagáis nada...Por favor...
   Un fuerte puño impactó en mi cara,haciéndome callar. Luego, una mano me sujetó por la muñeca y manejó mi mano de forma que hizo que mi dedo apretara el gatillo.
   (...)
   Rojo. Todo era rojo. Todo olía fuerte, metálico. Me dolía todo el cuerpo y la mente. Pensé que no soportaría eso, que no podría vivir con el peso de haber matado a mi propia hermana. Que ya nada valía la pena. Pero, entonces, algo nuevo nació en mi interior. Venganza. Solo quería eso, no puedo hacer que vuelva conmigo pero si puedo hacer que  descanse en paz y se sienta orgullosa de mi. Os mataré y nada podrá pararme.

No hay comentarios:

Publicar un comentario